miércoles, 17 de agosto de 2011

LA FE SIN OBRAS ESTA MUERTA

TEMA: LA FE SIN OBRAS ES MUERTA
TEXTO: Santiago 2:14 – 26
INTRODUCCION:
Cuando el gran misionero Hudson Taylor fue a China, viajó en un barco de velas. Mientras que se acercaban a la Península de Malay y la isla de Sumatra, el misionero escuchó a alguien tocando la puerta de su cabina. Al abrir la puerta, encontró al capitán diciendo, "Señor Taylor, no hay viento. Estamos acercándonos a una isla donde temo se encuentra puros caníbales."
"¿Qué puedo yo hacer?", preguntó el señor Taylor. El capitán respondió, "Yo entiendo que tú eres un cristiano y que crees en Dios. Necesito que ores a Dios para que nos mande viento." "Está bien, capitán, yo lo haré. Pero primero tu necesitas levantar y abrir las velas". "Pero eso sería una locura", dijo el capitán. "No hay nada de viento. Además, los marineros creerán que soy loco." Pero después de mucha insistencia de parte del misionero, se sometió a lo que le exigía.
Después de cuarenta y cinco minutos, el capitán regresó para encontrar al misionero Taylor todavía sobre sus rodillas orando. "Puedes dejar de orar ahora", dijo el capitán. "No sabemos qué hacer con el fuerte viento que tenemos."

Mathew Henry dijo: Creer verdaderamente no es sólo un acto del entendimiento, sino una obra de todo el corazón.
Deuteronomio 6:5 nos habla de un amor integral a Dios corazón, alma y fuerza, espíritu, alma y cuerpo.
Debemos procurar que nuestro espíritu este siempre en Comunión con Dios, que nuestra voluntad sea para Dios y que nuestro cuerpo sirva a Dios. Este equilibrio es fundamental para la madurez cristiana según lo expresa Santiago el hermano de Jesús.

MENSAJE:
V14. Santiago toca un tema muy controversial en la época en que fue escrita, y lo es también ahora en nuestra época.
Hermanos míos, ¿de qué le sirve a uno decir que tiene fe, si sus hechos no lo demuestran? ¿Podrá acaso salvarle esa fe?.
En esta declaración Santiago plantea dos elementos esenciales:
1.- De que me sirve decir que tengo fe, si mis hechos no lo demuestran.
2.- Esa fe, no puede salvarme.
Estas hipótesis claramente planteadas se aplican a muchas personas que creen en Dios, pero que sus hechos en la práctica no lo demuestran, por lo que dicha fe jamás podrá salvarlos.
Uno diría yo creo en Dios, y se le pregunta ¿pero por qué sigues adulterando? ¿Por qué sigues robando? ¿Por qué sigues emborrachándote? ¿Por qué sigues pecando?
Por lo que Santiago destapa una situación problemática que abarca la esencia de la fe en Dios.

V. 15-16 Fundamenta su anterior razonamiento con un sencillo ejemplo de misericordia. Si conoces a un hermano que está pasando necesidad y tú le dices solo Id en paz, calentaos, sacios. No sirve de nada. Es un acto racionalmente contradictorio. No hay coherencia. Mis actos están invalidando mi fe, la que lo hace sin sentido.
1 Juan 1:6, 2:9, 3:15.

V. 17 Esta es la conclusión a su sencilla hipótesis. Si la fe no muestra hechos, es muerta.
¿Qué es una fe muerta?, Es la DESCONFIANZA de lo que se espera, y la INCREDULIDAD de lo que no se ve.

V. 18. Santiago nuevamente se introduce en esta temática. Alguien dirá:
Esta bien, TU TIENES FE, PERO YO TENGO OBRAS, ahora bien, Santiago sabía perfectamente que la Salvación no es por obras. Y desarrolla la siguiente lógica
1.- MUESTRAME TU FE SIN TUS OBRAS, este es un acto irracional. Nadie puede decir que ama a Dios si no existe amor en su vida. Es un acto coherente de fe.
2.- YO TE MOSTRARE MI FE POR MIS OBRAS, mis actos hablaran más que mis palabras. Mi vida debe tener relación coherente con lo que digo.

Hay gente que dice, yo creo todo lo que se dice en la Iglesia, me gustan la alabanza y la música, pero no me gustan los diezmos, ni que me tengan que obligar para hacer misiones, etc.

Acaso el diezmo no es un acto de fe, pues entonces yo te mostrare mi fe por mis obras.
Acaso el predicar el evangelio no es un mandato, entonces yo te mostrare mi fe por mis obras.

Ya les dije, hay muchos que se escudan tras ese velo de auto justificación cuando dicen: ES QUE MI MANO DERECHA NO DEBE SABER LO QUE HACE LA IZQUIERDA. Como respondía un misionero, SI TU MANO IZQUIERDA SUPIERA LO QUE HACE LA DERECHA LE DARIA MUCHA VERGÜENZA.

V. 19. Santiago hace alusión a un hecho conocido básicamente por cualquier creyente. Los demonios tiene fe, pero sus obras no muestran nada, solo robar, matar y destruir.

V. 20 – 25 Santiago utiliza estos versículos para justificar su hipótesis con dos hechos históricos concretos, el caso de Abraham y el caso de Rahab.
En ambos casos hubo una acción que fue manifestada a partir de la fe en Dios.
Vale recalcar que ambos fueron parte de la genealogía de nuestro Salvador. Mateo 1:2, 5.

APLICACIÓN
Santiago concluye su exposición diciendo que así como el cuerpo sin espíritu está muerto, la fe sin obras está muerta.
Heb 11:6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
Por tanto podemos llegar a las siguientes conclusiones:
1. La fe si no va acompañada de una acción es inútil.
2. La fe viene por el oír, y el oír la Palabra de Dios. La acción acá es oír.
3. Pero la fe no solo debe venir, sino posicionarse en nuestra vida.
4. La fe es una acción clara de la trasformación en una nueva vida, no es una mera confianza pasiva a algo o a alguien.
Una noche se prendió de fuego una casa y el joven fue forzado a subir al techo. Su padre estuvo parado afuera con sus brazos extendidos gritando al joven, "¡brinca hijo y yo te agarro!" Él supo que, para salvar su vida, el joven tenía que saltar. Pero la única cosa que el joven podía ver era las llamas del fuego, humo y oscuridad. Como se puede imaginar, el joven tenía miedo saltar desde el techo. Su padre continuo gritando, "¡Brinca hijo! ¡Yo te agarro!" Pero el joven protestó diciendo, "Pero papá…..es que no te veo." El padre respondió, "Pero hijo, la única cosa que importa aquí es que yo sí te puedo ver."

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